Las hemos visto centenares de veces, pero no por ello dejan de asombrar las imágenes de la mujer manchega a lo largo de casi los últimos dos siglos, cuando la fotografía ya permitió reflejar, transmitir y conservar toda una historia de vida que ahora se resume en Vinculadas, la exposición itinerante que se muestra en el Centro Cultural de San León. Podrá verse hasta el 14 de septiembre.
Una exposición muy recomendable, construida sobre una colección de imágenes que en su día prestaron las propias vecinas de Membrilla al fondo de Los legados de la Tierra, de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y que ahora llegan integradas en una completa muestra fotográfica que plasma el intenso vínculo creado entre mujeres en la sociedad del siglo XX.
Así lo describen desde la propia área de Cultura de la Junta: “A través de diversas formas de socialización, la mujer ha ido forjando y consolidando profundos lazos en cada comunidad. Este legado tiene un carácter perdurable en el seno de las sociedades locales, por lo que, a través de su imagen impresa, es posible rastrear la permanencia de estas conexiones en las sucesivas generaciones inmortalizadas por la cámara. La representación fotográfica femenina revela una presencia fundamental de su figura en los rituales de paso, la educación, las celebraciones colectivas o las labores dentro y fuera del hogar. A través de las instantáneas de cada década iremos revisitando nuestra propia historia en momentos como la temprana infancia, la primera comunión, el matrimonio, la familia, el trabajo o la fiesta. Este recorrido en imágenes destaca el especial simbolismo que tuvieron los vínculos entre abuelas, madres e hijas, forjando un legado inmaterial de varias generaciones de mujeres.”
La mujer de Membrilla tiene un importante protagonismo en la exposición, gracias a la colaboración prestada desde el área de Cultura y Biblioteca. En las imágenes se reconocen a aquellas mujeres vinculadas a la iglesia a través de asociaciones como las Hijas de María, las que ayudaban en las labores agrarias como la monda del azafrán y en las labores de casa, lavando la ropa en aquellos ya olvidados tiestos de madera. Formas, usos, vestimentas, costumbres, que vuelven a la memoria en blanco y negro.
Lo curioso es que cada una de las imágenes puede extrapolarse a nuestra localidad, como también subrayan desde el propio Centro de San León de acogida: Salvo algunas excepciones, bastaría con tapar el nombre de la población para ser incapaces de identificar si esa foto pertenece a Membrilla o no.
Esto nos indica que lo que puede verse en la muestra es una historia universal de la mujer manchega. Y pone en valor el trabajo y la lucha de las mujeres de Membrilla que precedieron a las nuevas generaciones y les allanaron el camino.
“La difusión del patrimonio fotográfico popular conservado nos brinda la posibilidad de identificarnos con las mujeres y su papel en la construcción de la comunidad. En todo este proceso los pueblos de nuestra tierra serán un escenario esencial de este relato en femenino.”